¿Estás destruyendo la vida de tus hijos? ¿Qué tipo de crianza es más efectiva?

Parte 1: 3 Tipos Efectivos de Crianza

Más a menudo, un padre desea criar a su hijo de una manera que les permita enfrentar y conquistar los desafíos que enfrentan a medida que crecen y se encuentran con el mundo real. Es el resultado del tipo de disciplina que usa en ellos en las interacciones cotidianas.

Además, es vital notar que la forma en que eres como hijo tiene una conexión con la relación padre-hijo que tienes con ellos. Los tres tipos de crianza a continuación generalmente se combinan en la mayoría de las familias, solo que hay un enfoque particular que es dominante.

1. Enfoque Asertivo

En este enfoque, se esta dispuesto a escuchar, pero manténiendose firme para poder lograr un entendimiento mutuo. Al establecer límites, los padres no se desvían. Dan opciones y permiten que el niño tenga voz en la búsqueda de soluciones.

Los padres con este enfoque de crianza generalmente son persistentes para garantizar que el niño cumpla con sus solicitudes. Escuchan los pensamientos de sus hijos, son honestos, especialmente sobre sus sentimientos, y cortésmente dicen que no a sus hijos.

Además, los padres suelen ser empáticos. Establecen consecuencias razonables, no culpan a sus hijos por cualquier irregularidad, son transparentes al hacer solicitudes y tienen reglas flexibles.

Cuando emplea este estilo de enfoque, se construye una relación saludable entre padres e hijos. Los niños se dan cuenta de que pueden contar con el padre para comprender sus dificultades y también brindarles orientación y apoyo. Además, la autoestima del niño aumenta a medida que crece sabiendo que es amado. Pueden contribuir a la resolución de problemas y pueden manejar casi todo por sí solos. Este tipo de crianza permite que el niño lo vea como una fuente de apoyo. Se sienten amables, dignos de ser atendidos, entendidos y escuchados. Desarrolla un sentido de confianza en las relaciones, aprende a ser amable con los demás y considera el punto de vista de otra persona.

Además, el niño crece para ser independiente, responsable, tolerante, comprensivo y lo suficientemente inteligente como para manejar situaciones difíciles.

2. Crianza Autorizante

Se sabe que estos padres tienen altas expectativas de logro y madurez para sus hijos, a la vez que son cálidos y receptivos. Establecen reglas y límites al involucrar activamente a sus hijos y usar la lógica. Estos padres son principalmente cariñosos, solidarios y alientan la independencia.

Se sabe que los padres autorizantes se ganan el respeto de sus hijos mediante el desarrollo de relaciones saludables y estrategias de resolución de problemas. La relación entre padres e hijos se fortalece, y los niños se sienten libres de pedir orientación, apoyo y asesoramiento cuando y donde sea.

Los hijos de tales padres crecen sabiendo lo que los padres quieren de ellos y sienten que pueden cumplir. Pueden desarrollar relaciones saludables con sus compañeros, desempeñarse excepcionalmente bien en la escuela, volverse independientes y autosuficientes en sus vidas. Además, el niño crece con una mejor salud mental: menos depresión, ansiedad, autocompasión, pensamientos suicidas, delincuencia, abuso de alcohol y drogas. Son menos violentos y un poco más felices y contentos.

Este tipo de crianza también se conoce como estilo de crianza democrático y es el más recomendado ya que, por el Dr. Baumrind, es el más exitoso de los estilos de crianza.

3. Crianza de Campo Libre

En este estilo de crianza, el objetivo es fomentar la independencia en los niños al permitirles una mayor autonomía con menos supervisión de un adulto. Hace hincapié en que el niño funcione independientemente con un control parental cuidadoso. Este método permite suficiente exploración para que los niños manejen los desafíos de forma natural.

Las ventajas de utilizar este método de crianza en particular incluyen la promoción de habilidades de resolución de problemas en los niños, mejora la creatividad y ayuda al niño a fortalecer la formación de la personalidad y desarrollar la confianza. También hace que los niños sean más ingeniosos y prácticos en la casa y actuen mejor solos.

Es importante tener en cuenta que la crianza libre no significa ninguna forma de reglas y regulaciones o límites establecidos para los niños. Por el contrario, esta crianza de los hijos implica enseñar habilidades a los niños y corregirlos y guiarlos cuando cometen un error. Los padres que usan este método de crianza son amables y cariñosos a pesar de atreverse a dejar caer a sus hijos. A veces recurren a inculcar disciplina y castigo si las consecuencias naturales no sirven para ser una buena lección.

Sin embargo, para utilizar esta forma de crianza de los hijos, asegúrese de conocer bien las leyes con respecto a qué edad de los niños se les deja sin supervisión. Varían de un estado a otro.

Ahora, cómo crías a tu hijo es un asunto personal. La combinación táctica de los tres mencionados anteriormente puede resultar en el método de crianza más efectivo, especialmente durante la adolescencia.

Parte 2: 3 Peores Tipos de Crianza

Al no existir una forma perfecta de criar hijos, algunos tipos de crianza son francamente incorrectos y poco saludables tanto para los niños como para los padres. A continuación, analizamos algunas de estas habilidades de crianza inadecuadas para evitar:

1. Crianza en Helicoptero

La crianza en helicóptero, como su nombre indica, es, por supuesto, molesta e incómoda para el niño. En este método de crianza, los padres siempre se ciernen sobre la cabeza del niño. Se aseguran de estar involucrados en todos los aspectos de la vida del niño. Por ejemplo; su vida escolar, vida social, tiempo libre, están en todas partes y en cualquier lugar donde sus hijos estén presentes. Estos padres nunca quitan los ojos del niño, y esto es en un sentido muy literal. Los padres no confían en que sus hijos sean capaces de explorar el mundo que los rodea y explorar por su cuenta.

Por lo general, los niños criados de esta manera dependen tanto del cuidado y el apoyo de sus padres que parecen nunca estar listos para la vida adulta.

Este tipo de crianza no es adecuado para los niños, ya que los niños crecen sabiendo que siempre tienen un respaldo, como sus padres. Promueve la falta de independencia, confianza y responsabilidad en su vida adulta. Afecta su relación con los demás e incluso puede ser una espina en su vida matrimonial.

Los padres también se ven afectados de forma negativa mentalmente, ya que terminan sin tiempo para ellos, lo que resulta en estrés y, en general, mala salud.

2. Crianza Tipo Tigre

La Crianza tipo Tigre a menudo se relaciona con el método autoritario de crianza de los hijos. Aquí, los padres se caracterizan por ser muy exigentes con sus hijos en todos los aspectos de la vida, es decir, la vida académica, social y de ocio. Estos padres establecen altas expectativas y límites altos y esperan que los niños satisfagan estas demandas perfectamente. No involucran a los niños en ninguna toma de decisiones o resolución de problemas. Esperan 100% de obediencia y logros sin proporcionar ninguna forma de orientación o apoyo. A menudo, tales padres exigen obediencia ciega y usan disciplina severa y castigo para intentar controlar el comportamiento de los niños.

Los niños criados de esta manera a menudo son infelices, menos independientes, inseguros, propensos a problemas mentales y tienen más probabilidades de tener problemas de abuso de alcohol y drogas. También tienen una autoestima más baja, tienen un bajo rendimiento en la escuela, tienen pocas habilidades sociales y muestran más problemas de comportamiento.

Se hace creer a los padres que los niños les deben y, por lo tanto, esperan que sean siempre obedientes y los enorgullezcan. Olvidan que los niños tienen personalidades propias y no siempre pueden hacer lo que se les dice, también tienen opiniones y preferencias. Necesitan que sus padres los escuchen.



3. Crianza de Burbuja

Estos son padres sobreprotectores. No pueden dejar que sus hijos vayan a jugar con otros en el bosque o participen en experimentos científicos en la escuela. Envuelven a sus hijos con total cuidado y los protegen de todos los peligros que se les ocurran, algunos de los cuales son imaginarios. Encierran a sus hijos en un capullo seguro.

No es malo ser protector con su hijo; Sin embargo, ser demasiado sobreprotector es venenoso. Es porque los niños crecen sin estar preparados para el duro mundo exterior cuando son adultos. Los niños crecen sin tener experiencia en cometer errores y aprender de ellos. Su vida social se ve gravemente afectada ya que carecen de habilidades sociales.

Los padres se ven afectados por la preocupación constante por cosas insignificantes.

Estos y otros tipos de crianza relacionados no son saludables ni para el niño ni para los padres. Por lo tanto, miramos cómo lidiar con la mala crianza de los hijos en la sección a continuación. Seguir desplazándose.

Parte 3: Cómo Lidiar Con Los Malos Estilos de Crianza

Incluso en la crianza de los hijos, siempre hay margen para mejorar. Veamos algunas de las formas que puede utilizar para ser un mejor padre y mantener una buena relación padre-hijo.

1. Para Disciplinar:

Sea firme para garantizar que las consecuencias se cumplan estrictamente cuando el niño se porta mal.

Sé justo y claro. Indique las consecuencias de antemano para que el niño esté al tanto de las repercusiones del mal comportamiento. Además, el castigo debe ajustarse a la falta realizada.

Sea amigable mientras le hace saber a su hijo que ha actuado mal y que ahora tiene que enfrentar las consecuencias establecidas por ello. Expliqueles cuál es la mejor manera de actuar en el futuro para evitar el castigo, y aprecie cuando hacen lo correcto.

2. Padre como Maestro/Ejemplo

Muéstreles en detalle cómo le gustaría que se comporten y permita que aprendan. Mientras lo hace, aliéntelos, recompénselos y felicítelos por mantener el excelente trabajo y utilice críticas constructivas para ayudarlos a trabajar en las debilidades. Ayúdelos a aprender cómo expresarse y escucharlos atentamente. Escúchalos e intenta ver las cosas desde su punto de vista.

3. Use una Aplicación de Control Parental

Sin embargo, esta opción no debería ser tu opción número uno. Debe tener cuidado al usar aplicaciones de control parental. Es porque pueden romper fácilmente una relación padre-hijo bastante buena ya establecida. Hay casos en que los niños prefieren que se les hable en lugar de monitorearlos de forma remota.

Sin embargo, si se utilizan de forma correcta, son fundamentales para controlar la actividad telefónica, el seguimiento de la ubicación, la prevención del acoso cibernético y el monitoreo del tiempo de pantalla, especialmente en los adolescentes.

Conclusión

La crianza de los hijos es una tarea espectacular, y debes aceptarla de todo corazón. La forma en que tratas a tu hijo determina quiénes serán y qué tipo de padres serán si tienen hijos suyos en el futuro. Con los diversos tipos de crianza discutidos en este artículo, puede pedir prestado una o dos cosas para ayudarlo a criar a su hijo de una manera saludable. Hay consejos, aquí y en la web, sobre cómo ser un mejor padre. Se recomienda leer ampliamente y descubrir la mejor manera de criar a su hijo.

Evite depender demasiado de las aplicaciones de control parental, ya que pueden convertirlo rápidamente en un padre intenso, o lo que es peor, en un padre negligente. Sea inteligente.